Escucha tus Piernas

Tu salud comienza por las señales que envía tu cuerpo

Las piernas sostienen nuestros pasos, nos acompañan en el trabajo, en las caminatas, en el ritmo acelerado del día a día y en las pausas necesarias. Pero muchas veces solo nos acordamos de ellas cuando algo comienza a molestar. Cansancio excesivo, dolores, hinchazón, ardor, picazón, várices visibles o esa sensación constante de pesadez.

La campaña "Escucha tus piernas" es una alerta sobre la importancia de observar, comprender y actuar ante las señales que tus piernas están emitiendo. Pueden estar diciéndote que ha llegado el momento de buscar ayuda especializada.

Los signos que no deben ser ignorados

Según la Sociedad Brasileña de Angiología y de Cirugía Vascular (SBACV), síntomas como:

  • Sensación de pesadez o cansancio en las piernas, especialmente al final del día;
  • Dolores localizados o difusos en las pantorrillas o muslos;
  • Hinchazón persistente en los tobillos o pies;
  • Ardor, picazón o hormigueo en las piernas;
  • Venas dilatadas o várices visibles;
  • Oscurecimiento o endurecimiento de la piel de la pierna;
  • Heridas que tardan en cicatrizar.

Son manifestaciones comunes de problemas circulatorios que van mucho más allá del malestar estético. Estos síntomas pueden indicar condiciones como insuficiencia venosa crónica, várices y trombosis venosa profunda, todas con potencial de evolucionar hacia cuadros más graves.

¿Por qué ocurre esto?

La mala circulación en las piernas puede estar relacionada con diversos factores, como:

  • Hereditariedad (antecedentes familiares de várices o trombosis);
  • Sedentarismo (la falta o disminución de actividades físicas y/o deportivas);
  • Obesidad;
  • Uso de anticonceptivos o terapia hormonal;
  • Largos periodos de tiempo de pie o sentado;
  • Embarazo;
  • Tabaquismo.

El envejecimiento también es un factor natural que favorece las alteraciones vasculares, lo que hace aún más esencial el seguimiento médico a partir de los 40 años, especialmente en personas con factores de riesgo.

¿Cuándo buscar a un especialista?

Si presentas síntomas frecuentes o progresivos en las piernas, lo ideal es programar una consulta con un angiólogo o un cirujano vascular. Estos profesionales están capacitados para evaluar la salud vascular, solicitar exámenes y recomendar el tratamiento adecuado para cada caso.

Según las orientaciones de la SBACV, cuanto antes se diagnostiquen las enfermedades vasculares, mayores serán las posibilidades de evitar complicaciones graves, como úlceras venosas, trombosis e incluso amputaciones en casos extremos.

La importancia de la prevención y de los buenos hábitos

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 80% de los casos de enfermedades vasculares podrían evitarse con simples cambios en el estilo de vida. Mira algunas recomendaciones:

  • Practica actividad física regularmente: caminar todos los días ya hace una gran diferencia;
  • Evita el tabaquismo, que compromete la salud de los vasos sanguíneos;
  • Controla el peso corporal y mantén una alimentación equilibrada;
  • Evita permanecer mucho tiempo en la misma posición: levántate, muévete, estírate;
  • Usa medias elásticas de compresión si tu médico las recomienda;
  • Bebe suficiente agua y evita la ropa demasiado ajustada.

 

 

Escucha tus piernas y vive con más ligereza, salud y bienestar.

Ignorar las señales del cuerpo puede tener consecuencias graves. Escuchar tus piernas es un acto de autocuidado, un paso importante para preservar tu movilidad, prevenir complicaciones y mantener tu independencia por más tiempo.

La SBACV refuerza que cualquier síntoma persistente o molestia en las piernas merece atención. No postergues el cuidado de tu salud vascular.

Tus piernas hablan. Escucha con atención. Cuida con responsabilidad. Vive con más calidad.

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